jueves, 5 de agosto de 2010

Despertar

Viniste a mi preocupada por tus sentimientos
te sentías vacía y no correspondida
trate de curar cada una de tus heridas,
te sentí indefensa y quise protegerte,
te sentí fría y quise cobijarte.

Tus ojos brillaban mientras los más finos cristales caían de ellos
te rodeé con mi brazos,
quise envolverte en mis sueños
sentí tu corazón vació y te entregue todos mis sentimientos.

Cuando la esperanza del amor a ti volvió
me diste un beso dulce y mi alma sonrió
mis ojos cansados despertaron
mi corazón congelado latió y latió
el que siempre quiso dar consuelo
inconsciente de su soledad fue salvado.
































Tú mira a su ventana: si se enciende la luz ¡estás salvado!
Un paseo por las nubes

1 comentario:

Paquita Pedros dijo...

Que bello escrito y que bien se siente una cuando te consuelan
un beso corazon